Audiograma, sin audio...
Cada lunes se lanzaba un archivo sonoro y la gente a partir de ahí envíaba sus cuentos. Luego representantes de Escuela de Escritores escogían finalistas y ganadores, cada semana, así hasta este último lunes que proclamaron finalistas y ganador de todo el verano.
En otro momento os dejaré por aquí los premiados, y si puedo, creo que si, también os dejaré su audio, pero hoy os dejo el finalista de este pasado lunes, creo que es un texto que llegará al corazón de cualquiera y provocará lágrimas a más de uno.
El fragmento elegido para el audio era la carta de abdicación de Eduardo VIII.
"... Pero podéis creerme si os digo que me ha resultado imposible soportar la pesada carga de la responsabilidad y desempeñar mis funciones como Rey, en la forma en que desearía hacerlo, sin la ayuda y el apoyo de la mujer que amo. Deseo, asimismo, que sepáis que la decisión ha sido mía y sólo mía. Era una cuestión sobre la que debía juzgar únicamente por mí mismo..."
Éste es el microcuento que envió Elena Cebollero Prado.
Abre la boca
Abre, anda, abre la boca, no ves que tienes que comer... Qué bien te he peinado hoy, ¿eh?... Sé que te gusta... Y tú que decías que tenía manos de oso, menudo moño te he hecho... Abre, anda, abre la boca... Con sus horquillas y todo, y los de la bata blanca dicen que no te enteras. Qué sabrán ellos si soy yo el que te cuida y se que sonríes cuando algo te gusta... Abre, anda, abre la boca, que no me reconoces, que no vas a recuperar la memoria..., abre, anda, abre la boca, a mí me lo van a decir, a mí que llevo cuidándote seis... o son ya siete los años... Abre, anda, abre la boca.
Un beso.