I don't want a lot for Christmas There's just one thing I need I don't care about presents Underneath the Christmas tree I just want you for my own More than you could ever know Make my wish come true... All I want for Christmas Is you...
I don't want a lot for Christmas There is just one thing I need I don't care about presents Underneath the Christmas tree I don't need to hang my stocking There upon the fireplace Santa Claus won't make me happy With a toy on Christmas day I just want you for my own More than you could ever know Make my wish come true All I want for Christmas is you... You baby
I won't ask for much this Christmas I won't even wish for snow I'm just gonna keep on waiting Underneath the mistletoe I won't make a list and send it To the North Pole for Saint Nick I won't even stay awake to Hear those magic reindeer click 'Cause I just want you here tonight Holding on to me so tight What more can I do Baby all I want for Christmas is you You...
All the lights are shining So brightly everywhere And the sound of children's Laughter fills the air And everyone is singing I hear those sleigh bells ringing Santa won't you bring me the one I really need - won't you please bring my baby to me...
Oh I don't want a lot for Christmas This is all I'm asking for I just want to see baby Standing right outside my door Oh I just want him for my own More than you could ever know Make my wish come true Baby all I want for Christmas is You...
Por fin llegó la hora, mi amiga invisible durante tantos días sale a la luz.
Ha sido bonito conocerla, divertido a unos ratos, más triste en otros. Compartiendo algunos sentimientos y descubriendo con ella sus sueños.
No es tarea sencilla esto de los regalos virtuales, pero sé que mi regalo va a llegar al corazón de Aurora, y ella lo hará llegar a muchos más...
CORAZONES DULCES...
INGREDIENTES
7 cucharadas de gelatina sin sabor 3 tazas de azúcar 2 tazas de agua 1 taza de gelatina con sabor de fresa azúcar para decorar
PREPARACIÓN
En una olla coloca la gelatina sin sabor, el azúcar y el agua. Lleva la olla al fuego y remueve constantemente con una cuchara de madera hasta que hierva un poco. Luego añade la gelatina con sabor.
Deja hervir hasta que la mezcla espese y se forme una película en la superficie. Hierve un poquito más y baja el fuego.
Moja con agua fría un molde refractario rectangular y vierte la mezcla en éste. Déjala reposar durante toda lo noche. Al día siguiente verás que ya la mezcla está firme.
Forma tus corazones con un molde de esta forma. Con la mezcla restante forma cubos, triángulos o lo que tú prefieras. Pásalas por azúcar y déjalas reposar.
Puedes guardar tus corazones en una lata hermética durante días, sí es que tu enana deja alguna...
Entramos en el mundo de las sensaciones. Cierra los ojos y abre tus sentidos. Nos vamos al mundo de los sueños dónde todo es posible.
Pasaremos un rato en el más allá, nos iremos a un mundo de burbujas llenas de felicidad. Disfrutaremos de los duendes entre los árboles, buscando el sueño que nos vuelva a noches mágicas de antaño.
LLevaremos el dulzor a lo más hondo de nuestra alma para que no se pueda escapar. Extiende tu mano y podrás ver que alguien te da un trocito de paz, no lo dejes ir.
Recuerdas aquellos días, con aquella música de fondo, todos cantando la canción de las muñecas y aquellos trenes que ocupaban todo el salón, parecía que se llenaba de humo toda la casa.
Cada año por estas fechas nos llena de rojo nuestra vida, no podía faltar este año por aquí, es más volveré a llenar de rojo otro día, y no puedo olvidarme del principio de Edu y su saludo a todos, y claro tampoco dejamos de lado al Papa Noel verde aunque siga resultando extraño ese color.
Llegó el momento, estamos en el mundo de los sueños, huele, escucha, ¿lo notas?.Imagina y disfruta del momento.
Tengo un enorme baúl lleno de recuerdos navideños, de buenos recuerdos y alguno no tan bueno. Pero todos ayudan a formar esa imagen tan idealista de la Navidad que yo tengo.
Son tantos que ni siquiera tengo que cerrar los ojos para recordar, de forma inconsciente viene la sonrisa a mi boca, no lo puedo evitar.
Recuerdo de muy chiquitita las horas y horas que pasaba jugando con mi vecina M.. En su casa la Navidad comenzaba antes que en todas las demás. Recuerdo un hermoso y gran Belén, todos los años con musgo natural, río de papel de aluminio y lleno de figuritas maravillosas.
Pegaban en la puerta principal todas las postales navideñas que habían ido recibiendo año tras año, y nosotras jugábamos al veo veo con ellas todas las tardes.
Llegaba la Nochebuena, el día más importante en la familia. Siempre esperábamos a que llegase mi hermana para cenar. Algún año no llegó y recuerdo el enfado de mi padre, para él en ese momento terminaban las Navidades, no se daba cuenta de que el resto estábamos ahí.
Recuerdo a mi madre haciendo una fuente enorme de torrijas, las mejores que he comido en mi vida, sin ninguna duda. Sopa de lluvia y pollo guisado. Ese era el menú de mis primeras navidades. Años después debió mejorar la economía en casa y se pasó a la sopa de pescado.
Para mí eran momentos muy especiales, en cuanto llegaba mi hermana a casa todo era fiesta. Todo cambiaba en casa, bueno todo no, pero todos tenían otra cara. Ella venía a poner la guinda del pastel, como aquel año que decorando con guindas un pastel de mi madre casi nos quedamos sin él. El espacio no daba para más, había colocado las guindas con las siglas de Feliz Navidad y más rápido que el rayo lo cambió por Navidad Feliz, a mí no me sonaba bien, pero era lo que había entonces.
Así fueron pasando los años y llegaron las Navidades más tristes, mi hermana no podía venir, y la verdad es que no es lo mismo cuando alguien de tu familia falta a tu mesa.
Con el tiempo la mesa se agrandó, aumentamos la familia y nos juntamos con la familia del susodicho. Mi madre ya sólo se encargaba de sus torrijas, no podía pasar sin ellas, casi que se las comía ella todas, alguna de prueba y poco más nos llegaba a los demás.
Esas cenas, siempre con alguna pelea entre nosotras, algún tirón de orejas, el vino por el mantel, la sidra insoportable y todos rumiando turrón.
Todos esos recuerdos vienen a mi mente y me ayudan a sonreír, a mirar a mis enanas con ilusión, por ellas y por mí, a no sentir tanto la falta de esas torrijas y a soñar cómo si fuese niña y fueran mis primeras Navidades.
Querido Baltasar, esta es la tercera carta que te escribo, ya sé que las otras no llegarán, no las mandé, pero cómo tú lo puedes ver todo, lo dejo claro para no caer en malos entendidos entre nosotros.
He intentado hacer una pequeña lista de los regalos que deseo, incluso de los que no deseo, por si acaso recibes alguna petición para mí, así te ayudo en tu trabajo.
Pero es difícil, con lo fácil que resulta cuando eres niño, pides y punto. Deben ser los años los que te impiden pedir, o tal vez sea el miedo a no recibir, ahora que sé quien eres, sé lo cuesta cumplir con tus peticiones.
Dejaré de lado esos regalos que tú siempre llevas en tu saco, lleno de perfumes, joyas, guantes y todos esos detalles. Eso ve dejándolo por el camino, así te pesarán menos mi sacos de regalos.
Dirás que para no pedir tengo la boca grande, sacos de regalos. Sí, te digo bien, sacos, mejor así para que se no estropeen en el viaje, no se te mezclen con otros o se te caigan por algún balcón.
Así que no me enrollo más y te digo que quiero en mis sacos...
Un saco de luz para iluminar a los míos en su camino y que no sientan el miedo de la oscuridad...
Un saco de salud para todos, la justa, no pido dejar de visitar al doctor, no quiero que pierda su trabajo, pero sí que las visitas sean de rutina, para no perder contacto...
Un saco de amor, para poder repartir con los míos y con los otros. Ya sabes que a mí de esto me sobra, pero veo que a veces hace falta a mi alrededor y mejor tener las reservas llenas...
Un saco de música, para que no falte la alegría. La música tiene ese poder, alegrar en cualquier momento y en cualquier lugar...
Y por último, un saco vacío. Sí, un saco vacío para poder ir tirando todo lo malo que tengo dentro, lo que me hace daño a mí y lo que daña a los demás.
Sé que no es fácil lo que te pido, pero confío en ti, cómo siempre. En tu buen criterio está saber si merezco o no todo lo que pido. Eso sí, si con todo no puedes, y debes repartir no olvides el saco vacío, por favor...
Antes de perderme unos días con los míos deje por aquí pendiente un reciiclar... reciclo mi vida en cinco pasos...
Ver... Lo que hay detrás del envoltorio y divertirme mientras quito el papel de regalo...
Escuchar... Y no sólo oír, quiero escuchar las palabras de mi gente, tus susurros por la noche, la risa de mis enanas, el sol cuando sale y la luna cuando despierta...
Oler... La canela en la cocina cómo si mi madre estuviese allí, el aroma de tu cuerpo, el café recién hecho...
Tocar... Sus caras por las noches al dejar un beso en sus mejillas, tus manos junto a las mías, el cielo de vez en cuando...
Me rompo el cuello mirando el cielo, mostrándome ante ti. Dejando a un lado el cansancio y sueño me obligo a desistir. Ahora lo hago por ti, quizá dentro de un tiempo me vuelva a arrepentir, quiero pero no puedo.
Subido a tu terraza me planteo si será una ilusión, no me lo creo. Yo miro y tu te escondes hacia dentro. Cerrando aquel portón no pasa el tiempo, tampoco creo que corra el viento que nos roba nuestros sentimientos.
Quiero volar y el suelo está lejos y me detiene el miedo, alguna vez faltaron reflejos. No más impedimentos para considerarte al menos buena amante. Nos lo dice un espejo, ya nada es como antes.
Mirándote a los ojos creo y veo que te atrapa mi forma de mirarte. Después de alguna vez subestimarte no me conformo con besarte, porque te quiero como tú a mí antes y tras mostrarte no supe apreciarte.
Ahora tengo los ojos bien abiertos guardando por si vuelves a cruzarte. He mirado a parejas como ejemplo para no ser tan torpe al abrazarte, y susurrarte "te siento lejos..." y hace mucho ya que me arrepiento...
¿Qué carrera querés estudiar?: Ahora mismo me gustaría estudiar Turismo y un Master de Desarrollo turístico, me dicen que lo puedo hacer a la vez...
¿Cuántos hijos querrías tener?: A mí gustaría tener uno más, pero el susodicho dice que hemos cubierto el cupo con dos...
¿Vivirías en casa o apartamento?: Ahora vivo en un tercero sin ascensor, me encantaría vivir en una casa, siempre lo hice con mis padres...
¿Qué vas a hacer en una hora?: Iré a buscar a las enanas a la guardería...
Qué vas a hacer en una semana?: La próxima semana en Londres... haré de todo...espero
¿Qué vas a hacer en un mes?: Espero un maravillosos desayuno de churros con chocolate, ya veremos si tras una noche de juerga o una noche tranquilita en casa...
¿Te gusta ir al cine?: Adoro el cine, y sí, con palomitas...
¿Cómo te gusta vestirte?: Rapidito que ahora hace frío...
¿Cómo duermes?: Del lado izquierdo en posición fetal...
¿Te gusta dormir?: Lo justo y necesario...
Una Frase de una Canción: ...Voy a recoger mis alitas rotas y las pegaré trocito a trozo y volaré...Búscome de Bebe
Las Frases Que Más Usás: Será posible...
¿Te gusta cantar?: Me encanta cantar, pero a estas alturas gracias al tabaco lo hago fatal...
¿Qué soñaste ayer? No suelo recordar mis sueños, y despierta son tantos...
Equipos de Fútbol: Barreda Fútbol Club, Gimnástica de Torrelavega, Racing de Santander y Fútbol Club Barcelona...
Pepsi o Coca: Coca cola light y sin cafeína...
Clinton o Bush: Ninguno de los dos...
Calor o Frío: Calor...
Rubios o Morenos: Castaños...
Playa o Montañas: Playa...
Perro o Gato: Perros de cualquier raza o sin raza...
Carne o Pollo: Pollo de cualquier forma...
Mc Donald’s o Burger King: Mc Donald´s
¿Que sientes ahora?: Frío, que tengo la puerta abierta...
Te gusta: Tú...
Odias: Odiar
Viaje soñado: Uuuufff... son tantos, me quedo con la familia en Nueva York...
Amor: Susodicho...
Razón para vivir: Mi familia me llena de razones cada día...
Razón por la que morir: Por ellos...
Mejor pensamiento: Siempre que llovió paró...
Último ridiculo: Un estupendo siete en el vaquero...
La persona de la que te acuerdas ahora: De mi jefe, y no para bien...
Despídete: Besos.Adiós.
Octava Parte
Estoy: Ansiosa...
Quiero: Vivir...
Tengo: Amor en grandes cantidades...
Odio: Las dietas...
Perdí: Todos los paragüas que te puedas imaginar...
Escucho: La radio casi todo el día...
Le tengo miedo: Al sufrimiento de los míos...
Estoy encantada de: Mis hijas...
No estoy: Triste...
Bailo: Cada vez que puedo... me encanta
Canto: Te canto a ti...
Escribo: Lo que me sale de dentro...
Pierdo: La paciencia muy rápido...
Me confundo con: Las miradas de la gente...
Novena Parte
Mi madre piensa que soy: No lo sé, pero creo que se quedó orgullosa de conocer a su primera nieta...
Mi novio piensa que soy: De novios de todo, ahora, qué soy su mejor desgracia...
Cuatro cosas que te destacan: Amiga de mis amigos, alegre, comprensiva y un poco cabra...