Para mañana...

Nada como celebrar un día especial, y da igual el motivo, mañana es por Mamá, como sí fuera por Papá, el caso es que celebremos. Me gusta agradecer y no más que cualquier otro día, pero por qué no, mañana también.

Siempre regalé de confitería, con un detalle para la mesa me parecía que por satisfechos nos dábamos todos, nunca me gustó gastar dinero en otro tipo de regalos, cada uno tiene su día, no hace falta añadir más derroches cuando mande San Corte Inglés.

Este año cambiamos el ritual, para el día del Padre ya lo estrenamos, abuelos y susodicho de lo lindo disfrutaron y espero que mañana la abuela pueda dar la misma cuenta que ellos, con ganas ya se quedó la otra vez.

Con la ayuda de la enana grande, o mejor dicho, yo ayudo a A. a preparar unas galletas de chocolate, agradecidas a La cocina de Lubina, excelente libro que nos tiene loquitas a las dos. Ojo, entiéndase que sus excelencias son para cocinar con enanos, poco más allá.


Ingredientes:
21 galletas maría
7 cucharadas de leche condensada
7 cucharadas de perlitas de chocolate
3 cucharadas de cacao ( cola cao en el peor de los casos)
Coco rallado










Triturar las galletas lo más finas posibles, añadir la leche condesada, las perlitas de chocolate y el cacao. Amasar bien. Cuando todo esté bien mezclado, espolvorear un poco de cacao en la encimera y hacer un rollo con la masa, envolverla en papel de aluminio,dejar reposar en el frigo al menos 4 horas. Cuando esté bien frío, quitar el papel de aluminio, cortar en rodajas y espolvorear coco rallado por encima.

Sí el detalle va para Mamás... preparar un cuadrado de papel celofan en el color escogido al gusto, cerrarle con un lazo a juego y añadir un par de soplos de cariños...

Un beso.