Toda mi vida...
No fue una sonrisa, ni una mirada, ni siquiera sus palabras. Fue algo más simple e inevitable, un tick, ese tick en sus ojos, algo nervioso, que no podía evitar cuando me veía.
Han pasado veinte años, sigue teniendo esos ojos nerviosos, medio guiño, medio llanto, todo tú.
Se sienta a mi lado, sin palabras, sin abrazos, sin caricias, siento su guiño, le siento a él, siguen dándole esa cara de niño que no se fía, que sueña y que quiere más.
Un beso.
Han pasado veinte años, sigue teniendo esos ojos nerviosos, medio guiño, medio llanto, todo tú.
Se sienta a mi lado, sin palabras, sin abrazos, sin caricias, siento su guiño, le siento a él, siguen dándole esa cara de niño que no se fía, que sueña y que quiere más.
Un beso.
0 Sonrisas:
<< Home